Pío Baroja

El Aprendiz de Conspirador


Read by Antonio Redondo


El aprendiz de conspirador empieza presentándonos la figura de Pello Leguía, imaginario pariente de Baroja, criatura hecha a i…

Elizabide el Vagabundo


Read by Alba


Muchas veces, mientras trabajaba en aquel abandonado jardín, Elizabide el Vagabundo se decía al ver pasar a Maintoni, que volv…

Médium


Read by Alba


Soy un hombre intranquilo, nervioso, muy nervioso; pero no estoy loco, como dicen los médicos que me han reconocido. He analizado tod…

La sima


Read by Alba


El paraje era severo, de adusta severidad. En el término del horizonte, bajo el cielo inflamado por nubes rojas, fundidas por los &ua…

El reloj


Read by Alba


Porque todos sus días, dolores, y sus ocupaciones,  molestias, aún de noche su corazón no reposa. -Ec…

La sombra


Read by Alba


Porque el que se ensalzare será humillado, y el que se humillare será ensalzado. (S. Mateo, v. XII, c. XIII.) Hab…

Es raro


Read by Alba


II. De bohemio —Pues verá usted. Hace diez años vivía yo en una buhardilla de la calle de Vaugirard, enfrente del jard&…

Conciencias cansadas


Read by Alba


Salí del teatro, disgustado, triste, con el cerebro lleno de ideas negras. Tanta grosería, tanta bestialidad, me molestaban. M…

Mari Belcha


Read by Alba


Cuando te quedas sola a la puerta del negro caserío con tu hermanillo en brazos, ¿en que piensas, Mari Belcha, al mirar los mo…

El trasgo


Read by Alba


El comedor de la venta de Aristondo, sitio en donde nos reuníamos después de cenar, tenía en el pueblo los honores de c…

Marichu


Read by Alba


La noticia corrió de boca en boca. Marichu, la mujer del caserío Aitola, tenía una enfermedad rarísima, que se l…